¡Viernes! ¡nuestro último día!
Ya llevábamos cinco días, y todavía no habíamos visitado la ciudad de Portimao.
Conocíamos muy bien, nuestra zona, Praia da Rocha, y su entorno. De pasear después de una buena ducha al regresar de nuestras rutas, de salir a hacer la compra como un vecino más, etc.. Pero no habíamos ido a ver el Portimao de verdad. Por lo que la misión de esta mañana, sería: Objetivo Portimao.
Estamos ante la segunda ciudad más poblada del Algarve, y aunque a día de hoy, viva por y para el turismo, en tiempos pasados, fue el puerto pesquero más importante de la región.
El procesamiento de pescado, y en concreto de la sardina, era tan fuerte en esta ciudad, que su museo, se encuentra dentro de una antigua conservera. Ubicada en la zona de los viejos muelles. Hoy convertidos, en una agradable zona de paseo y en donde hacer deporte.
Aunque cada vez son más los grande edificios residenciales destinados al turismo, todavía, queda algo de ese viejo Portimao pesquero, y acogedor. Que transmite la tranquilidad de la ciudad, muy alejada del bullicioso Faro.
En el viejo muelle, podrás sentarte a observar el paisaje, escuchar el ruido del mar, o leer un libro en tranquilidad. También encontrarás numerosos cafés, todos con un toque antiguo, y locales en donde degustar de un buen pescado fresco.
Si como nosotros, venís de la modernidad de Praia da Rocha, sentiréis como si hubieseis cambiado de ciudad.
Las previsiones. daban agua toda la semana, y nosotros, ya llevábamos cinco días no solo secos, sino que además, con ¡sol!.
Llovió, diluvió en nuestra llegada, porque todos nuestros viajes empiezan pasado por agua, pero este Viernes, lucia el sol. Por lo que decidimos, ir a hacerla compra, y coger provisiones para el viaje de regreso.
Pero nuestro día, no acababa aquí. Después de comer, y viendo la maravilla de tiempo que el Algarve nos dedicaba de despedida, nos bajamos a la playa, a por un chapuzón de despedida.
Al igual que todo en la región, la Praia da Rocha, es espectacular. Cuevas y formas imposibles en las rocas, un dorado y un agua únicas.... solo tenemos buenas palabras.
Conclusión
El Algarve, es una zona espectacular. Podrás disfrutar de gastronomía, de ocio, de vida nocturna, de la familia, de los amigos y de paraísos naturales.
Es un sitio, donde podrás ir de hotel y disfrutar, alquilarte un apartamento, y disfrutar, o irte de furgoneteo, y disfrutar. Hay sitio y vida para todos los modos de viajar.
Pero nuestra opinión personal, es que si de verdad quieres ver, y disfrutar de las maravillas que ofrece esta zona, debes de ir fuera de temporada. En los meses de verano todo estará masificado, y no serás, o no podrás ver, ni disfrutar, todo lo que ofrece.
No serás capaz, de apreciar la grandeza del lugar, y eso sin hablar de la diferencia de precio.
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